“Dilma era una presidenta incómoda para la clase política que la destituyó”, dijo el abogado José Eduardo Cardozo, en una entrevista con Télam.El Supremo Tribunal Federal tiene sobre la mesa una apelación del juicio político fudamentado en que fue una estrategia de desvío de poder del grupo político del presidente Michel Temer para tomar el gobierno y ejercer la defensa ante la Operación Lava Jato desde el Poder Ejecutivo.Según dijo Cardozo, la antigua oposición y el grupo del entonces vicepresidente Michel Temer “se unieron para derrocar a Rousseff porque ella no controlaba el avance de las investigaciones de la Operación Lava Jato”, la investigación anticorrupción que marca la agenda del país desde 2014.“Aquello que hablábamos se confirmó, lamentablemente. Ningún gobierno surgido de un golpe parlamentario contra la democracia podría sacar al país de la crisis. Es más, la crisis se agravó, tenemos un presidente denunciado por corrupción en el cargo. Dilma fue sacada por una cuestión técnica sin sentido, indebidamente”, dijo.El exministro de Justicia de Rousseff fue su abogado en todo el proceso de impeacment iniciado en diciembre de 2015, que contó con la suspensión del cargo el 13 de mayo del año pasado y finalizó con la destitución el 31 de agosto por 61 votos contra 20 por el delito de violar la ley de responsabilidad fiscal.Si bien políticamente las chances de revertir el impeachment parecen efímeras, Cardozo entiende que la corte debe asumir la responsabilidad de votar esta apelación: “Pusimos un mandato de seguridad ante el supremo tribunal que espera juzgamiento. La acusación fue un pretexto jurídico, una situación presupuestaria que todos los presidentes hicieron, una decisión que no es ilegal y ni siquiera es una acción dolosa”.El relator de la apelación es justamente el ministro más aliado de Temer, el reciente ministro de Justicia Alexandre de Moares, ex dirigente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB). Fuente: Agencia Télam
Discussion about this post