Vecinos de Santa Catalina y López y Planes enviaron una foto a PRIMERA EDICIÓN para advertir la falta de mantenimiento de un refugio al que van desde niños hasta abuelos para esperar un ómnibus.
No se trata siquiera de un lugar muy alejado de las cuatro avenidas. “No puede ser que ningún funcionario municipal haya advertido este pastizal del que salen arañas, ratas y se juntan mosquitos”, dijo Paula, una de las vecinas molestas por el estado de la parada de colectivos.
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