No aportaron mayores detalles. Ese día, tras la testimonial que resta, se conocerían los alegatos y el fallo del tribunal obereño. Cinco testigos declararon ayer, en la segunda jornada del debate oral y público por el crimen de Omar Héctor Martínez (24): ninguno aportó mayores novedades en relación con lo ocurrido el jueves, cuando las testimoniales apuntaron directamente a los acusados de homicidio simple, los hermanos Miguel (23) y Luis Castro (25).
Tal como pudo atestiguar PRIMERA EDICIÓN, la audiencia se inició ayer alrededor de las 8.40. Ante los magistrados Lilia Avendaño, Francisco Aguirre y José Pablo Rivero, el primero en declarar fue uno de los médicos que estuvieron presentes en la autopsia.
La herida era de arriba hacia abajo, de derecha a izquierda. Pudo haber salpicaduras de sangre en la ropa de los autores, ya que el puntazo fue cerca del corazón y en ese sector hay mucha presión, graficó el doctor Luis Ruíz Díaz (53), ante la consulta de los jueces y las partes.
José Marcelo Do Santos (34), a su turno, aseguró que fue él quien citó a los hermanos Castro a la costanera de El Soberbio, donde todo ocurrió. Íbamos a hablar de un trabajo de construcción, enfatizó. Llamativamente, el testigo ofrecido por la defensa dijo no haber visto ningún arma blanca en poder de los sospechosos, al contrario de lo aportado por la batería de testigos que declaró durante la primera jornada.
Lucas Oscar Da Silva (27), Flavio Lorenzo Do Santos (39) y Brian Rosa (21), todos de El Soberbio, no aportaron mayores datos a la hora de enfrentar el micrófono de la calle Nueve de Julio al 700 de Oberá.
Pendiente quedó la declaración del testigo Leandro Schlindwein, también domiciliado en El Soberbio y quien no se presentó a declarar. Los jueces ofrecieron la posibilidad de sumar lo aportado por ese joven en la instrucción por lectura, pero tanto la fiscal Estela Salguero de Alarcón como los defensores, Matías Da Luz Núñez y Rodrigo Rojas, consideraron necesaria la presencia de Schlindwein, razón por la que la testimonial será el próximo lunes.
Ese mismo día, de no mediar imprevistos, comenzarían también los alegatos y el tribunal podría dar a conocer su veredicto, según lo aportado por las fuentes.
Martínez fue ultimado a puntazos en la costanera de El Soberbio, alrededor de las 22.30 del domingo 22 de marzo de 2015.
Según la principal teoría, aquel crimen fue producto de un desencuentro en una fiesta de la Liga Colonial de Fútbol que continuó a orillas del río Uruguay, hasta donde los Castro habrían ido para vengar la disputa. El dúo quedó comprometido tras los testigos que declararon el jueves.
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