Uno de esos días que me encontraba con mis alumnos del secundario donde enseño, me asaltó una duda muy particular: Se me acerca una alumna y me pregunta si creía en la magia y al contestarle que sí, me dice: y ¿usted hace magia?. -¡Claro! le digo, ya vas a ver.
Uno de esos días que me encontraba con mis alumnos del secundario donde enseño, me asaltó una duda muy particular: Se me acerca una alumna y me pregunta si creía en la magia y al contestarle que sí, me dice: y ¿usted hace magia?. -¡Claro! le digo, ya vas a ver. Y luego de conversar por dos clases y reflexionar sobre la manera en que estamos acostumbrados a ver lo que nos pasa y a cómo observar el futuro para que nos sea de mayor impulso y motivación, se me acerca la misma alumna diciéndome: profe tiene razón, se ve distinto si pienso así… Y le digo: ¿Ves que hago magia? Ya he logrado que te entusiasmes y veas de una manera más alegre lo que vas a ir generando para vos, y sonrío y concluyo diciéndole: Vos también vas a hacer magia, ya lo verás. Y vi el brillo en sus ojos y supe que lo creía
Todos tenemos la capacidad de hacer magia, en otros y en nuestras vidas. Es solo cuestión de prestar atención.
Me gusta despertarme y visualizar en mis pensamientos ideas que vayan formando lo que voy a vivir el resto del día. A veces me programo para recibir sorpresas, a veces para dar más abrazos, a veces para sonreír más de lo que estoy acostumbrada y otras veces hasta incluso me visualizo teniendo mucha compasión y paciencia con alguien que lo necesite. Esto último es muy bueno, porque a todos nos toca siempre encontrarnos con alguien que en su batalla interior no sabe cómo manifestar su necesidad de amor y en vez de pedirlo solo se manifiesta de maneras que a veces nos resultan chocantes.
La magia está en lo que pensamos que vamos a vivir.
Nuestro cuerpo está formado por millones de neuronas que actúan como un cableado que lleva y trae información a toda hora, por ende lo que pensamos es la información que nos conduce y que nos impulsa o debilita. Y si puedes elegir qué energía o información transmitir a tu cuerpo ¿cuál elegirías?
En mi día libre semanal (necesario de manera prioritaria para todos) me programo para disfrutar, festejar, celebrar, meditar y sentirme feliz desde temprano. Y con esa actitud comienzo el día, que es la predisposición que conducirá los eventos y circunstancias que se vayan dando. Puesto que desde mis pensamientos ya mágicamente he creado y decidido lo que quiero vivir. Y de manera igual para todos los días. Me gusta sentirme protagonista de lo que me sucede y estar predispuesta de manera positiva para ello.
Todos podemos crear magia. Y solo quien cree en la magia es capaz de verla. Que tu imaginación y creatividad sean tus aliados!
Colabora
Natalia de las Nieves
Coach y Terapeuta
Motivacional
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