Los ladrillos iban ocultos en un Mercedes Benz. Un paraguayo nacionalizado argentino y con residencia en Buenos Aires terminó detenido. Investigan el origen del estupefaciente.
Un duro golpe a los narcos volvió a asestar personal de Aduana en colaboración con Prefectura Naval en el resguardo jurisdiccional de esta localidad, donde se incautaron casi 90 kilogramos de cocaína, una carga histórica de ese estupefaciente para la provincia.
El procedimiento se llevó a cabo en momentos en que personal perteneciente a la AFIP, apostado en los controles de ingreso del mencionado paso fronterizo, realizó una inspección exhaustiva en un vehículo Mercedes Benz, conducido por un ciudadano de nacionalidad paraguaya, con DNI argentino y con residencia en la provincia de Buenos Aires.
La actitud del sujeto al volante habría despertado sospechas entre los funcionarios aduaneros, al manifestarse con nerviosismo a la habitual requisitoria acerca del lugar de donde provenía y hacia donde se dirigía, como así también a las preguntas de rigor.
Fue entonces que ante esa circunstancia, las autoridades dispusieron la revisión de la documentación del viajero y del vehículo, detectándose irregularidades en un sector del rodado, más precisamente en los zócalos.
Al inspeccionar minuciosamente, descubrieron una sustancia blanca acondicionada en dicha parte del auto. Por si fuera poco, había más en la parte trasera del piso.
El hombre detenido circulaba en el citado automóvil sin acompañantes. La patente del rodado se encuentra registrada en la localidad bonaerense de Pilar.
Por estas horas permanecía detenido y en carácter de incomunicado, a disposición del Juzgado Federal de la ciudad de Oberá, cuyo titular es el juez José Luis Casals, con intervención de la Secretaría Federal, a cargo de Luis Andrés Villanueva.
Pesaje final
El pesaje final de la sustancia incautada, que al ser analizada por los expertos dio como resultado positivo para clorhidrato de cocaína, arrojó un peso total de 89,850 kilogramos.
El procedimiento marcó un punto de inflexión y, quizás, ratificaría los cambios de la ruta de la cocaína, afincados desde siempre en la frontera con Bolivia, aunque ahora cada vez más presentes en el nordeste argentino.
No es la primera vez que en esta localidad, situada a unos 83 kilómetros de Posadas se incauta cocaína, e incluso en algunas ocasiones se intentó cruzar con armas de fuego y drogas de diseño, sin poder burlar los controles aduaneros.
El pase desde la ciudad paraguaya de Bella Vista se realiza mediante la balsa internacional, la misma que ayer utilizó el apresado para ingresar a Misiones. Se trata del último pase del turno mañana.
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