El conjunto santiagueño aprovechó los fallos de Lucas Robertone y Bazán en la definición para sentenciar el marcador por 4-3 y obtener una victoria histórica en el estadio “Alfredo Beranger” de Temperley. En los 90 minutos reglamentarios, Central Córdoba se había mostrado más compacto y estuvo ganando el partido hasta quince minutos antes del final, gracias a un gol su delantero Enzo Pérez.
En ese momento del complemento, apareció el juvenil Matías “Monito” Vargas” para estampar la igualdad para los dirigidos por Gabriel Heinze, que no pudieron contrarrestar el golpe que significó la salida de Mauro Zárate.
En los penales, Central Córdoba convirtió los cuatro que ejecutó y aprovechó los dos errores de los jugadores de Vélez para conseguir el boleto a la próxima instancia y quedarse con el premio de 560 mil pesos. Ahora, los de Santiago del Estero esperarán por el ganador de Tigre o Guillermo Brown de Puerto Madryn.
“Lo normal fue lo que pasó, por las condiciones que tuvimos para preparar el partido. Así, no vamos a ser competitivos”, lanzó Heinze, en un dardo que pareció tener como destinatario a la dirigencia del “Fortín”. Lo cierto es que Vélez jugó un mal partido, con muy poca conexión entre sus jugadores juveniles, a los que Heinze busca potenciar desde los pasados seis meses, cuando logró la permanencia.
El entrenador Gustavo Coleoni armó una telaraña para cargar de responsabilizar al máximo a su rival y supo aprovechar su oportunidad para poner el 1-0, tras un centro de Ortega desde la derecha y la aparición en el punto penal de Pérez. El “Fortín” fue puro empuje en el segundo tiempo en busca del empate, que recién encontró a quince minutos del final y por un blooper del arquero César Taborda.
Pero las paradojas del fútbol hicieron que el propio Taborda fuera quien contuviera el remate del juvenil Bazán -ya había errado otro pibe como Robertone-, y le diera la clasificación a Central Córdoba de Santiago del Estero.
Fuente: Agencia de Noticias NA