Tal vez acostumbrado a un trato demasiado “gentil” de los medios a los que concede entrevistas en Misiones; Closs se encontró con un panel ansioso por escucharlo dar cifras de pobreza, políticas de asistencia a desnutridos. Cuando se despachó con que en la provincia existe la “desnutrición congénita”, admitiendo que hay padres desnutridos con hijos gestados con desnutrición.Y sobre la pobreza, lanzó la frase “no me importa cuánto es sino las soluciones”. ¿Qué soluciones se pueden planificar si no se conoce el diagnóstico?En la década de la renovación, con ocho años de clossismo, hay una larga historia de ocultamiento de datos de pobreza. Este Diario ha sido siempre el que publicó estudios, encuestas públicas y privadas sobre el tema. Incluso ha tenido que soportar que personajes como el exministro de Salud José Guccione (hoy candidato a la intendencia y con mandato como diputado nacional) enviara cartas documento para evitar que se sigan haciendo públicas estadísticas que no dejaban bien posicionada su mala gestión.En una entrevista que se publica hoy en estas páginas, el padre Alberto Barros, titular de Cáritas, aseguró que “en el fondo, ocultar las cifras de pobreza es una forma de admitir que se ha fracasado en erradicarla”. Y agregó que “si hay una desnutrición congénita significa que estamos arrastrando una desnutrición estructural”.El Gobierno en el ocaso de Maurice Closs cerrará su mandato siendo recordado por haber eliminado estadísticas que antes brindaba el Ipec, como el costo de canasta alimentaria, pobreza, indigencia, entre otros datos importantísimos para generar acciones. Y, tal vez, aprendiendo el valor de las palabras y los discursos que da en Buenos Aires y caen como plomo en Misiones por el peso de la mentira.
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