Señora Directora: Quiero manifestarle mi preocupación por el aumento de canes por todas partes, sin que la sociedad tome conciencia del grave problema que ello genera. Por eso me dirijo a quienes no saben qué significa tener un perro como mascota y le digo: si decidiste adoptar un perro, tenés que saber que el mismo integra tu familia, por lo tanto es parte de tu vida y lo tendrás que atender, dándole alimento todos los días y cambiarle el agua dos veces por día (revisando que no le falte en verano esencialmente). Si hay algo que ya está suficientemente probado, es la fidelidad de un perro y por lo tanto debe ser respetado y atendido como corresponde. No se puede concebir que haya personas que se entusiasman con un cachorro y cuando éste llega a ser adulto, es como si molestara o ya no es tan gracioso como antes, por lo tanto deciden abandonarlo en cualquier parte sin tener en cuenta que un perro no puede arreglárselas por su cuenta, porque fue criado en una casa donde lo atendían. En consecuencia se va deteriorando su físico y de no aparecer alguien solidario que lo rescate, inexorablemente se morirá con un sufrimiento lento y progresivo. ¿Qué pasaría si tus padres te hubieran abandonado cuando eras un niño? Por todo lo que significa esa desgraciada situación, te digo a vos que si no estás plenamente comprometido en cuidar a tu mascota, sacate la idea de la cabeza y comprate un perro peluche. En cambio, si estás en la lista de quienes han abandonado a su suerte a su perro, sin ninguna duda “eres un ser despreciable”. Espero que la nueva Ordenanza Municipal que está en proyecto, sirva y sea manejada por personas responsables para que no sea una más que quede en el olvido.
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